lunes, 14 de noviembre de 2022

Infancia

Cuando el sol se arroja sobre el abismo

la noche atropellaba nuestra cocina

y rugia con furia de león.

Las azucenas temblaban y se arropaban

en un circulo de tenue cristal que las cercenaba

sin piedad.

Solo se escuchaba el estruendo

de sus petalos blancos quebrados  caer.

El rugido del león nos congestionaba la sangre en la cara

y con la palidez de los copos de algodón

nos agostabamos de a poquito viendo arrollar la vida

mientras se nos desangraba el alma

y se desalmaba el cuerpo

en medio de un secarral sin hierba verde

ni espigas de pan. 






lunes, 24 de octubre de 2022

Santi

 Siempre llego tarde para ser mayor que tú. Lo serás siempre, lo quieras o no y en el límite exacto de una semana. A pesar del tiempo que pasa y de no disponer ya de días sin persiana que iluminen las hojas francas de tu cuadernario, sigo admirando profundamente la posibilidad que no pudo traducirse en líneas. Esa conversación que no tendremos, porque tu alma desuncida  navega ya por lunas viejas  que no permiten el diálogo con  todo lo no dicho y lo por decir.

Fuiste la primera persona en leerme sin prisa y sin prejuicio, quien construyó para mí un palacio secreto donde poder poner a lavar penas propias y ajenas en el agua fría del Leteo sin necesidad de atravesar la laguna Estigia. Esa que atravesaste tú, solo, una noche sin luna.

Me pesa la impotencia de no tener derecho bastante para buscar en tu cuaderno de campo los últimos versos, para beber de tu saber y tu sentir las tintas que lograrían conmoverme como siempre me emocionan tus palabras y tu talento. La facilidad para poner en claro lo enrevesado, lo oscuro y darle luz.

"Lamento que no me creas" fue la última charla que mantuvimos sobre esa pasión interrumpida por carceleros vulgares que no pudimos esquivar.
"Lamento que no me creas" es el título de un último trabajo que me muero por leer y que sé que no podré hacer jamás.

Tu amistad fue siempre para mí una esperanza, una razón, un consuelo en los días difíciles y un abrazo en los posibles. Eras tabla de salvación y contigo lejos se cegó un poco más el mar. Me sostuve en otras tablas que nunca fueron maderas nobles, de ebano o de roble. Tablas de salvación que yacían flotando a la deriva en pantanos secos, ausentes de sal, sin corriente ni naciente, sin remolinos ni orilla. Aún flotan en el agua los cadáveres insepultos que nada pudo salvar, que no logré poner a resguardo de los seres ingenuos que no pueden digerir el pan simple del sentimiento.

Hoy serías ya mayor que yo y durante una semana seremos distintos en el mismo calendario pero semejantes en la misma sintonia emocional.

He aprendido a estar sin ti, pero te echo de menos.

A ti y la que yo era cuando tú estabas conmigo.

A los tres.

 

domingo, 16 de octubre de 2022

Primer dia de terapia

La mariposa  se  estrella una y otra vez contra el cristal. Al otro lado,  la luz y las azucenas florecen tan cerca y tan lejos a la vez. Ecoa el  zumbido taladro que ha ido rotulando caminos siempre en dirección opuesta a mi razon de ser. 

He comenzado la terapia y el primer encuentro fue facil e intenso, sin embargo revivir de nuevo los dolores pasados me ha removido hasta el centro del pecho. Creo que he llorado todas las lágrimas que represaba desde que los hechos ocurrieron como la niña que no tiene a quien acudir para aligerar el peso de un baul enorme que no puede arrastrar. Si la adulta que me vive tiene la fuerza de un titan es pq arrastra desde entonces el mundo hacia sus carriles. Es porque sabe que después del acoplamiento de la verdad, circulará el vehiculo del alma que me habita con la ligereza del viento. Del viento que esparce las semillas y acerca la lluvia para esta tierra reseca que guarda en lo profundo de su ser las esperanzas de la luz, de la llama que ilumina, del viento que siembra, de la planta verde que florece sencillamente por que la vida esta en ella.

viernes, 14 de octubre de 2022

Brocal

Abocada al brocal de un  pozo ciego

solo distingue la negrura de un agua silente y quieta.

Ansiedad profunda cuya luz inerte

convierte  la claridad radiante de una tarde de verano

en una lumbre cenicienta y fría.

Grises y muentos suben por la baranda oxidada y la herrumbre

de la escalera interior que conduce a los olmos más negros.

La cuerda pende del tiempo y su balanceo

acompasa el roneo de pájaros chillones, 

de avispas borrachas,

de hormigas voraces que atraviesan con alfileres negros

las alas dulces de las  mariposas quietas.

 Bocas desdentadas que muerden con dientes de león.

Cada paso cercena el espacio y la distancia minúscula de mi propia estima

primando la posibilidad del mayor desconsuelo,

del frio final, 

del último escalón, 

del acantilado afilado.

Y aún así no pierdo el paso.



 

 


Cumpleaños numero 53

  Hay dias del año que pasan inconscientes de sí, travestidos entre la prisa diaria  y la ausencia automática de nosotros mismos . Son días que respiran entre  la inercia de lo cotidiano que los uniformiza de tan identica manera que se hace dificil distinguir entre ellos como si siempre lo hubieran sido asi. Y no es cierto que todos sean identicos, porque a cada día le corresponde un don. Por ello, y  tal vez para que podamos reiniciarnos  y tomar cuerpo de nosotros mismos  algunas fechas marcan la diferencia aunque no sean fiesta, pero no dejan de ser  festivas y especiales en su sustrato más íntimo. Son días dignos de la pausa y del cuidado que nos invitan a entrar en un estado de consciencia lúcida y trascendente para reubicarnos y sentirnos propios y no ajenos en nuestra existencia. 

Conmemorar nuestro día de nacimiento puede ser uno de ellos.

Naci un día como hoy, la luz se abrió para mi con toda su fuerza en la primera bocanada de aire que  mi cuerpo inspiró y ese oxigeno azul dió inicio a esta senda recorrida entre días de sol y mareas de viento. La existencia nos trae y nos vincula  la oportunidad de ser alguien en este universo a partir de una imperceptible celulilla simple e ignorante que contiene en sí el gen de todo el universo viviente. Un universo disponible, abierto y libre que nos acoge en la bienvenida con la caricia de una madre, los brazos de un padre y el afecto de todos los que aun no conociendonos ya nos aman. A partir de ahí todo es posible: el aprendizaje, la emoción,  los afectos nuevos, el misterio de los días por descortinar, el placer de la oportunidad, la sintonia con las almas afines, la sinergia del amor, el obsequio de cada amanecer venido y por venir y la alegria de ser algo en  esta Tierra que nos acoge generosa. 

Vivir se convierte en un verbo a conjugar, punto por punto bajo la mirada de una consciencia natural que moldea tanto nuestro barro como nuestra luz.

Cinquenta y dos vueltas al sol para aprender a  vivir, porque  existir todo lo creado existe: existe la piedra y la fuente, existe el metal y el puñal, existe el fuego y la leña. Todo lo creado existe, y si bien el nacimiento nos confiere la existencia, pero  la vida es cosa nuestra.


lunes, 10 de octubre de 2022

Duz 2

Aquello que la arrebató, aquel huracán de alegría para la emoción más pura no encontraba en su vocabulario otro palabra que el término, "duz".Y yo hubiera dado la mitad de mi helado de nata para que esa explosión de ternura también ocupara mi alma.No fue entonces, a pesar de los esfuerzos de mi mente en conseguirla, cuando me arrebatará la emoción, sino mucho tiempo después y bien a mi pesar, cuandoella ya no estaba para compartirlo.Lo llaman la Magdalena de Proust.Me recorrió el cuerpo un escalosfrío de dicha que no tenía aparente causa. En lo más hondo del alma una palabra generaba un vendabal de alegria tan grande que tuve que acogerme entre los brazos y la dulzura lo invadió todo como una relampago lento y profundo que me conmovió intensamente. El placer de vivir inunda la vida algunas veces. Basta un sonido, una palabra, un aroma para iniciar una revolución que se planeaba indecisa. Viene de afuera pero conmueve a dentro. Hay caminos insondables que se manifiestan espontaneamente, sin que nadie lo planee. La vida trabaja siempre, lo entendamos o no. Como la fuerza de la gravedad nos mantiene pegados al suelo, tanto si la creemos como si no. No somos la vida, solo los corpusculos pequeñitos de la luz que la conforma Y la alegria nos alcanza cuando nos descuidamos y le permitimos brotar sin intervención humana. Solo cuando el universo lo propone. Ser testigos de lo inmarcesible confiere a la existencia esa magia de ser, de formar parte de algo mayor que nosotros mismos, de sentirnos alguien en este universo que nos convoca y nos protege. Es como descubrir que dios existe y se ocupa de nosotros. No sentirnos tan solos en medio de la voragine luminica de la pantalla. Ser algo más que la mano y el cuerpo. Ser unos con la vida, ser aunque no tengamos y no sepamos porque.

lunes, 25 de julio de 2022

sin latido

Bajo la superficie de esta linea plana de agua morada viven en suspensión todos los corpusculos vacios  de la herrumbre que la envenena.

 Ojalá, tuviera algo que decirte, un reproche,  una queja, una protesta que lanzarte envolviendo  una piedra que pudiera conmoverte para restaurar el equilibrio perdido.

Ojalá, tuviera que reconvenirte, reajustar las velas, rectificar una vereda o sencillamente evitar tu mirada porque lo que me nace de la emoción es dolor, o rechazo, abandono o tristeza.

Ojalá, tuviera algo que poder lanzarte al corazón, que una piedra o una herida pudieran recuperarte traerte de nuevo  al camino del que has sacado un pie.

Ojalá, tuviera algo para darte aunque fuera una serpiente que te hiciera temblar, huir o atacar pero te conmoviera, te levantara  de tu ambiente esteril envasado al vacio. Algo que  te empujara al agua profunda del pozo aunque fuera para estremecerte de frio o gritar de ansiedad.

Ojala pudiera conmoverte en dirección al precipicio porque ello, convendrás conmigo, es mejor que mirarte con atencion flotar en un espacio vacio, falto de gravedad y de destino.

Cualquier carbón prendido en mis manos preteriria a  no tener una palabra para ti, nada que decirte,  no desear verte a mi lado ni sentir tu aliento  junto a mi. 

 Cualquier herida menos caminar por esta vereda de arenas inmoviles donde tus pies no dejan huella  ni imanta  el aire  tu presencia. 

Cualquier dolor menos la ceguera de ti y el desierto de esta agonia lenta sin paliativos ni esperanza, cualquier soga alrededor del cuello a la  indiferencia del latido muerto.

domingo, 19 de junio de 2022

Gata

 La noche susurra en tu oído

y trastabillas entre las plumas grises de una paloma furtiva.

 Te enreda un roneo de sirenas eternas

de la raiz a los nidos  mientras tiembla la luz en la calle.

Cuando las manos se acercan

te traban tan fuerte y con tanto infortunio

que la razón se cercena en  milimétricas láminas.

Las azucenas blancas caen como hojarasca seca a un barro espeso.

El dolor gime escaso de fuerzas,

el humo atraviesa los ojos de  parte a parte 

y arrebatada la lumbre de invierno,

a la vuelta de marzo, con la primavera las brasas escriben en trazos negros

su verdarero nombre en abril.

 Y  ya nunca más vuelves a creer 

en gatas de pajar hartas de pienso.

El cuerpo tambien habla y escribe.

 El cuerpo también habla y escribe.  Taconea con golpes de voz bronca vocales y rimas sin terciar palabra ni grafiar papel.

 El cuerpo rasga las horas del tiempo y convierte el calendario en un reloj  cubierto de sal sin  salida al mar. 

Las hojas del otoño ruedan hacia  la primavera secas y muertas mientras los esqueletos sin fruto danzan el baile de la muerte con prestancia e invierno.

Se estremece la epidermis, la piel tiembla.

 El estruendo de los versos se aboca al vacio y el acanttilado espera los besos suicidas de bocas abiertas de hierbabuena verde y limón.

Juntos los sentimientos dispares rasgan el cielo y las cucarachas desvirgan el sonido con su ruido de morir.

Mi madre y mis tias

 Tuve la suerte de nacer bajo un sol de otoño que despertaba a noviembre con petalos de crisantemo. Cerca de los santos las arterias de mi tierra confluian en un paraje abierto cubierto de marmol como la lealtad de los seres que no se olvidan nunca. Además de nacer en plena madurez de la uva tuve la dicha de nacer de   tantas mujeres como mi madre supo cultivar que cada una de ella se convirtió en una madre pequeña que no dejaria caer el fruto del arbol por mas que el destino marcara a cuchillo la rama cubierta de hojas. Mis recuerdos se tiñen de un dorado suave que acaricia el alma sin estridencia ni prisa entre sus conversaciones jugosas que siempre reian. Y esa risa fertil sembró mi futuro de un trigo verde que se transformaria en el pan del camino mucho despues de que el destino natural de los seres cerrara sus ojos pero jamas pudiera  insonorizar sus bocas y la espuma blanca de su mar de amapolas.


Tuve la suerte de nacer de una madre y de renacer de muchas de ellas. De mis madres, del legado femenino que mi progenitora supo cultivar para mi y para ella cultivo su madre y para su madre la suya ella la suya que finalmente era la de todas. Ella no necesitaba madre porque lo era a vida completa y a todas llamaba cuando sus pies torturados no puediron caminar. La que me parió y las que la acompañaban en su caminar escabroso mis madrinas y mis manos.

Naciamos niños y nuestras muchas madres nos regalaron un cariño certero y valiente que sabian consolar con un beso los dolores mas grandes del universo.

Manos cercenadas

 Cercenadas las manos,

arrancadas del calendaerio de los honores

despojadas de la esperanza de la cosecha,

abrasadas por la sinrazon de la violencia,

heridas  abiertas desde el parto del tiempo

aún les queda un resquicio de piel humana entre los dedos

para calmar las llagas de otras manos

que nadie acaricia y el tiempo arrasa

para levantar los labios del triste

y para acariciar los petalos de la flor 

recien cortada.

No podrán recomponer la siembra helada

ni evitaran la caida de Babilonia,

no serán las manos que sostengan el palio

ni cuenten con usura los bienes del mundo,

Sin sedas ni oropeles

solo con la fuerza de la vida 

que aún injerta en ellas la esperanza

son las manos que sostienen la luz de una vela simple

que se ofrece en el momento grave

justo un minuto antes de la debacle total.

Serán unas manos como estas

las que recompongan  la tierra y sus escombros.


 

domingo, 1 de mayo de 2022

Dia de la madre

Después de una noche eterna, al amanecer  pudo por fin descansar un poco. Desde la tarde anterior una fuente de agua manaba de su pecho y lo empapaba todo. Cambié su ropa y me recosté a su lado. Le tendí mi mano y le dije que si me dormía y no la escuchaba la apretara para  despertarme. Yo dormía como las liebres con un ojo abierto y otro cerrado mientras encogia el alma entre las costillas.
En un momento en que pude cerrar los ojos, ella, en medio de su afonía , pronunció con voz queda un "corazón" y yo me levanté como un resorte para ayudarla.

¿Qué te pasa?- pregunté llena de prisa.

- ¿Te duele? ¿Tienes palpitaciones?¿Notas el corazón?

 Y ella me miró con sorpresa porque yo no entendía lo que quería decirme:

No - me dijo-, no me duele. No es eso. Está tranquilo. He dicho "corazón" para nombrarte porque tú eres mi corazón. y me miró con aquellos ojos llenos de ternura que tanto echo de menos. Han pasado seis años pero aún "yerbe el mosto el jaraiz".

Y hoy que es el día de las madres soy yo quien pronuncia con orgullo la palabra "corazón" para felicitarte  a ti y otra de las madres queridas que me dejaste en prestamo y hoy regresa contigo.A todas las madres, abuelas  y tias del mundo pero especialmente para vosotras, Ángela y MariFe, muchas felicidades allá donde estéis.

viernes, 22 de abril de 2022

Guerra y paz

 El ansia de poder no soporta el consuelo de la paz. Es un fuego que calcina sin llama, un humo espeso que lo carboniza todo. No hay agua que apague esa sed de agua de mar  ni el pozo lleno hasta la boca es suficiente para el corazón reseco que se ciega y se animaliza sin término. La sangre que cae de esas manos no se coagula nunca, jamás deja de manar en cascada infinita, arrasandolo todo tierra, mar, aire, nubes, soles, planetas.  No hay suficiente nieve en las montañas del mundo que aclare la tierra cuando esta cae en las manos de la  codicia y del ansia. Mata las flores, estropea los frutos, disemina su frustación en una siembra de horrores que no tiene perdón ni cosecha.

La muerte cuando es natural no tiene rostro, acaricia la mano de manera suave, sin artificio ni  prisa. No estruja el alma de quien parte ni arrebata el fututo de quien recuerda. Se permite mirar a los seres que cumplen su recorrido vital con la misma naturalidad que el aíre recompone el llanto que se inicia en  la inspiración de quien llega. Sin embargo la guerra, que pretende ser legitima, solo rompe el equilibrio del mundo, inclina la balanza de la injusticia hacia el terror y corrompe las almas que tizna de un negro profundo, oscurece la vida hasta convertirla en un lodazal de sangre y de  miseria intrasitable, irrecuperable y absurdo. 

Enloquece la esperanza, destroza la alegria, anula el futuro,  silencia la existencia con un estruendo atroz sin que nada lo justifique. Pretende excusarse en letras capitales y todo lo aniquila sin orden ni razón. 

La guerra es la sinrazón de los fanfarrones, de los enanos mentales,  de los vampiros pendencieros de la bondad y de la luz. La muerte no tiene rostro, pero la guerra sí tiene nombre. Lo que no tiene es plural porque siempre es la misma sierpe de cizaña envenenando el trigo de la buena gente. Detenta la autoridad del monstruo que le vive adentro y que solo refrenda  la indiferencia de los cobardes que blanquean su misera moral escudados en un poder que la naturaleza jamás les confirió. 

Mientras la justicia no reformule la ley sobre los abusos cometidos, mientras la tierra mantenga los huesos carcomidos de los inocentes en su seno sin sepultura digna, no habrá paz perdurable ni seguridad en la hacienda ni esperanza para nadie.  Por mas que se trate de ocultar la atrocidad bajo los mantos de piel cibelina, el olor de la impostura se extenderá sin remedio. El tiempo marcará con su paso inexorable el ciclo de la recuperación, pero si la humanidad no recompone la sinrazón cada poco se levantará un lider que anuncie poder y privilegios para unos pocos que retomaran las armas de la barbarie en un ciclo infinito. Darles oídos será manchar de nuevo la blancura de la paz con el barro del terror. 

Niguna generación queda libre de atropellos, pero sí puede ser educada para apegarse a la compasión, a la equidad, a la generosidad que la paz ofrece siempre a los corazones pacificados. Se hace necesario recordar que el  bien que no hacemos nos intoxica y que los valores de la paz no se concretaran nunca  por la comodidad o la indiferencia.


miércoles, 20 de abril de 2022

Su grito

 Su lamento era un desgarro en la oscuridad,

en la intemperie  no existe la luz

ni la lluvia es bastante para apagar el descomunal incendio

sin medida del dolor.

En el secarral fue un pajaro sin alas

que batia sus huesos sin entender porque no volaba.

La guerra  reventaba por dentro y

explotaba por fuera con una  metralla era tan abrasadora

que la tierra se abria en un canal volcánico  herida, arrasada, muriente.

No quedaba hilvan alguno en el cerebro.

El vendaval rugia,

la fiera se desperezaba y al entreabrir los ojos

la rocalla interior despertaba más cruel y más odienta.

No hay carroña bastante para tanta hambre sedienta de espanto.

La puerta giraba y  el horror del mundo invadia la sala

como un derrumbe de montaña, como si  un terremoto atronador hubiera

despedazado el monte y piedra a piedra lapidara  sin clemencia nuestra lápida.

Asi era el cenagal de desprecio y furia que arrasaba cada dia nuestra cocina,

nuestra vida, nuestra alma.

 El corazon en brasas vivas

luchando entre la niebla y el olvido no consigue guarecerse de tanto odio inutil

salvo cuando el tul de algodon blanco y seda delicada rozaba con su voz tierna y gentil

nos retornaba al nido y nos cubria con sus plumas dulces.

 Era su mirada tierna el agua fresca en la ardencia de la llaga inmensa,

el perfume que recompoe el hedor de la sangre descompuesta,

 el nido de la cumbre ártica, el gel luarizante en la cicatriz carbónica.

El antidoto al veneno, el canto en la media noche, la templanza en la tempestad,

 la luz que derrama el sol recien nacido para aliviar todos los dolores de la noche.

miércoles, 23 de marzo de 2022

Humo, nudo y niebla

 Todo parecía humo

y era niebla.

El vapor de la taza de café,

el agua sobre la piel caliente,

tu mirada desnudando el día.

Todo una apariencia vacia

que rubricaba un desquerer

a plazos y cuotas de interes compuesto.

La luz que entraba por la ventana,

filtraba la bondad de la persiana, 

vencía al silencio oscuro sobre la intención vacia

izaba el verano como una bandera

ahogandose en la habitación

de un amanecido invierno.

A las seis de la mañana

el cielo se despereza como

un niño y sale el sol.

Se me llenan los ojos de ti.

Y las lagrimas se evaporan

sobre la melancolia de mi piel

La nostalgia de vivir

me enrabieta por todas perdidas,

los mensajes como la niebla

se han marchado siendo humo

buscando una nubosidad variable

y plena de ausencias.


 



 

se elevaba ligera como un

lunes, 24 de enero de 2022

Brene Brown

 Cuando una mujer se gusta  a sí misma se convierte en un peligro. Es peligrosa porque  puede perder incluso el  sentido estético y vestirse con cualquier prenda de ropa que encuentre en su armario aunque su perro se harte de ladrar horrorizado cuando la ve mezclar flores, lunares y rombos en el mismo atuendo y sobre sus mismos  hombros. Para llegar a ese extremo es posible que antes haya recorrido ese hilo que viene desde el lugar opuesto. A la valentia desde la vulnerabilidad. A la esperanza desde  la disciplina. A la asertividad desde la verguenza.  Desde la verguenza al abrazo de su propia carencia. La valentia no coincide con la comodidad jamás porque para  ser valiente hace falta mucho corazón y la comodidad suele vestirse con las prendas de la escasez. Cuando alguien se decide a vivir y sentir en la arena, sabe que caera, que se levantara para volver a caer y rodara entre las piedras y la rocalla, sabe que el sol le quemara la piel y las córneas, que no será fácil mirar a la cara a los suyos cuando el fracaso le arrebate la ilusión de ser perfecta, pero si persiste un tanto más, si es capaz de soportar la vergüenza, si puede exponerla a la luz con humildad sin  permite anidar  en la oscuridad de lo oculto, la vergüenza morira porque no soporta el sol, la luz, la conexión entre las personas.

 Quien es valiente no sabe si triunfará, de lo único que está seguro es del fracaso. El fracaso es la argamasa de la audacia, del atrevimiento, de la bravura porque no se llega a ser valiente sin exponerse en la arena y todos somos tan vulnerables que mostrarnos humanos resulta en ocasiones intolerable, por eso salir al extrado y arriesgarse al ridículo posible, a la caida, al desvalor  El valor es proporcional a la vulnerabilidad que estas dispuesto a soportar.  Para una mujer  reside en su físico, el valor de los hombres en no parecer debiles. Todos tenemos miedo, para pararle los pies al miedo es necesario exponerlo a la luz. Hacer el trabajo que nos cabe y tal vez arriesganos a decir te quiero antes del postre.

Formar parte del universo no es lo mismo que encajar en él. Para encajar es necesario pensar qué quieren que digas, cómo y cuándo, qué vestir y en qué momento. Pero encajar en el mundo no nos permite vestir como deseemos. Por eso una mujer que se gusta sabe que puede vestir con rombos y flores y no desentonar. Ser valiente tiene muchos inconvenientes y por serlo se paga un precio. No serlo tambien tiene un precio y es no vivir con  alegria.  Ganar no es llegar en primer lugar y ocupar el podium más elevado. Ganar es arriesgarse a perder, perder y aún así estar agradecida por haberlo intentado.

viernes, 7 de enero de 2022

sillas y bares

Dices que a las seis de la  mañana

la amistad es otra copa.

Que los escalosfrios del amor

son látigazos que marcan la rosa de los vientos,

 los puntos cardinaes del ser.

Dices que nacen de las raices del vientre,

que trepan hacia el corazón para vivificarlo

y mueren en la cabeza  para repetirse en bucle una y otra vez.

El placer muere en cada segundo para renacer al instante

más ansioso y más pirata.

Dices  que no hay comunión más 

sagrada  que la intimidad frente a  una silla vacia

en un lugar lleno de gente.

La amistad de las seis de la mañana

es un bar abierto donde guardar un secreto.

Un secreto no es poca cosa,

es la inmersión de los seres vivos

en  las consciencias nocturnas

con el jubilo de la camaraderia

que no puede dejar de ser ruidosa y

compartida. 

Muchos la teminan llorando

y entrelazan  noche y  vida

como dos amantes que hacia mucho

que no se encontraban.

La amistad a las seis de la mañana 

es el resurgir de nuevo

con copa o sin  copa.

 



Ayer

 Esconde tus manos, como si fueran garras de  usura, Esconde tu alma  como si fuera lodo feroz Oculta tus ojos, que nadie lea la vergüenza e...