Permitid hablar a los versos
devolvedles la palabra.
Dejad que los lienzos se llenen de color
y las sábanas blancas tendidas al viento ondeén como banderas
universales de luz,
Aceptad que la esperanza
quiebre los barrotes del prejuicio y apague
las hogueras de la inquisición alimentadas de libros inmortales.
Facultad que las letras bailen entre nosotros
para que limpien de nostalgias
los semas impresos de las guillotinas viejas.
Permitid que renazca la sabiduría
entre las gentes humildes
para que las palabras olvidadas de sí
retomen el papel y las almas,
las puñetas y el estrado:
"Paz, piedad, misericordia y justicia".
No hay comentarios:
Publicar un comentario