Mi amiga Alba es muy peculiar. Vive en Madrid de lunes a viernes, y viene al poblado los fines de semana. Todos, absolutamente todos los fines de semana y fiestas. Y no es por que a ella no le guste quedarse en la capi ni mucho menos, solo que su marido es más de pueblo que las amapolas y Madrid no ha entrado en él.
Viven en un piso de unos 47 m2, ellos y sus dos hijos, en un tercero sin ascensor que compraron en pesetas, cuando todavía se podía comprar un piso en Madrid y pagarlo en la presente reencarnación.
En el poblado compraron un terreno para hacer una casa pero me da el palpito que haciéndola en fines de semana les llegara la jubilación sin haberla estrenado. Eso si, en la vivienda nueva no van a tener problemas de espacio, viendo los planos creo que el salón de fiestas tendrá más de 40 metros!
A lo que iba, que Alba ha cumplido años estos días y su marido y sus hijos le han regalado una HORMIGONERA...!
Todavía me duelen las mandíbulas de reír cuando me lo han contado y la he visto.
No se la han podido envolver en papel de regalo, pero le han colocado un lazo azul que es lo más, jejeje.
Y la ilusión que le ha hecho a ella es de quedarse de patata.
Ya he comentado alguna vez que no soy muy buena haciendo regalos, que prefiero expresar mi afecto a través de otros lenguajes, pero no lo he podido resistir, esta vez he hecho una excepción y le he regalado un SACO DE YESO, eso si, yo si lo he envuelto y le puesto el lazo. Pegatina de Felicidades, por que me parecía inútil colocarle el "espero que te guste", sabiendo que le iba a gustar seguro, jejeje.
He quedao como una reina y nos hemos reído una barbaridad.
A partir de ahora ya tienen resuelto el problema de Reyes, enamorados, aniversarios y otras celebraciones, se pueden ir regalando un palé de ladrillos, unos sacos de cemento, un camión de arena, un trapalé, juas, juas, juas.
domingo, 13 de noviembre de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
La madalena de Proust: una percepción evoca un recuerdo intensamente
A veces, cuando el duelo termina, cuando se acepta la pérdida y la alquimia del tiempo transforma la ausencia en nostalgia, el recuerdo s...
-
Las mujeres han existido desde siempre, como las vasijas y el ajuar; un poco menos que los árboles y las gallinas y un poco más que las es...
-
"Sentí un estremecimiento en el estomago, quede trémula, me desoriente con las palabras, la respiración se torno jadeante, el corazón s...
-
Hay un par blogs que desde que los descubrí mi encantaron. Siempre espero que llegue el domingo para poder ver las actualizaciones semanal...
Jajaja! Me encanta tu amiga Alba!! :-) Un beso, guapa!
ResponderEliminarjajaja si es que la medida de la felicidad es tan personal que comparar es tontería...
ResponderEliminarmuchos besos
Kika, no me extraña que te encante, es encantadora y ahora anda buscando quien le ayude a poner en marcha la hormigonera, ¿te apuntas?;))
ResponderEliminarA punto de, huy eso de la felicidad personal me suena bien, y ya ves que variedad de personales medidas se gasta la gente.
Abrazo grande.
Eso de la hormigonera, queda como regalo muy bollo jajajajaja
ResponderEliminarQuizá ella hubiera preferido un albañil del este, cachas y que se encargara de ir haciendo los cimientos con parada a las 11, la hora coca cola!!
¿Chris, parece muy bollo una hormigonera?!jajajaja
ResponderEliminarA Alba no le gustan los albañiles del este, tiene uno español, muy chulito ¡qué hace dice ella que hace unas masas!;))
Un besito.
Jajaja, eso ya es pasarse de prácticos! Pero bueno, a ella le encantó, mejor que mejor.
ResponderEliminarUn beso
*Ami, que gusto verte de nuevo. Te he echado mucho de menos por aquí y por allí.
ResponderEliminar¿No te gustaria que te regalara una hormigonera? jejeje
Un beso, guapa.
Si viviera más cerca me faltaria tiempo para hacerme amiga suya... para que me prestase la hormigonera!!! XDD
ResponderEliminar