viernes, 1 de abril de 2011

Gansa

De normal soy bastante pato pero la mayoría de las ocasiones que me permito despejar mi lado más salvaje lo que parezco es  bastante gansa.
Cuando un alineación de planetas favorable se posa en mi sino (que no en  mi signo), el espíritu de la inoportunidad me acompaña hasta que se vuelven a desalinear y van con viento fresco a fastidiar a otra.
En este mes de marzo se han dado varias conjunciones planetarias y me han permitido volver a comprobar como mi frágil fortaleza se da de  bruces con la voluntad astral.
Para empezar me he pillado el pulgar de la mano derecha con la puerta del maletero de mi coche, no puedo culpar a nadie y eso me fatiga aún más. La uña esta tomando un bonito color granate y quién la ve y entiende de uñas "encarnadas" me pronostica que se va a caer.
Del sofocón que me pille, creo que es por eso, tengo unos hermosos herpes y llagas en la boca que me impiden reír, comer, hablar y claro ahora todo me hace gracia y debo reír diciendo juas, juas, juas y con la boca chica.
Acudo al médico a consultarle sobre toda esta flora y coincide conmigo en el efecto que  maletero sobre dedo= producción herpes y demás molestias, pero cree conveniente  hacerme unos análisis.
Cuando me señala que vamos a descartar el VIH, me brota otro herpe más. Me pregunta si tengo pareja estable y pues le digo que ni estable ni inestable y no que  veo necesario gastar del erario público en análisis que ya le digo yo que están descartados, pero ella insiste.
Me receta una pomada y me voy a la farmacia. El farmacéutico es un chaval joven y muy agradable al que le gusta vacilarme porque me debe de ver inofensiva y  aunque de normal me compongo muy seria solemos echar unas risas muy educadas.
 Pero hoy mi parte gansa estaba por salir y al llegar a las puertas les he dado tres pases mágicos tipo ábrete sésamo (creía que nadie estaba mirando) y al entrar y ver al joven boticario partiéndose el pecho, me he debido poner del color de mi uña encarnada. Te concedo tres deseos, me dice, (que además de verme, me ha oído el muy cuco).
¡Anda ya boticario, dame esta crema  y vuelve a la lámpara, listo!
A ver si  en la próxima luna…

3 comentarios:

  1. hay días que pasa de todo... debes ser muy peculiar..entiendo mucho de gansadas

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  2. *Ico, como me gusta la palabra peculiar, muchisimo más que "rara" que es la etiqueta que me suelen colocar.
    Besitos

    *güertana, menos mal que no me pidieron los marcadores, no se cual hubiera sido mi reacción, lo mismo me bajan las defensas de golpe al oirlo y luego los analisis...
    Un abrazo

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  3. Lo bueno no es ser gansa sino saber reírte de tí misma :)
    Hasta me dio ternura la entrada... cómo va la uña? cuidate!

    besitos

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