martes, 20 de mayo de 2025

I Pajarillo se presenta

 A veces, hay que  reconocer un derrota desde su inicio para no liarse en la frustración como un cordón a la pata de un romano. Desde afuera existen vacíos ajenos tan extraños que  duelen como propios, pero que nadie puede llenar, reconocerlo a tiempo facilita que el suplicio de la impotencia drene al exterior y los  desiertos no propios no se conviertan con el tiempo en nuestro agujero negro.

Podría haberle bajado la luna cada noche y nada hubiera iluminado aquel caos oscuro que goteaba sin pausa desde el desague de su infancia. El maltrato atrae sin remedio una sarta de situaciones obscenas, de pensamientos en bucle y de personas malqueridas que mezclan sus desordenes con el dolor inconmesurable de una infancia abandonada en un bosque,  en un pozo oscuro o en una casa vacía para la cual no hay llave. 

Su luz se gastaba con la furia de una explosión nuclear y en el mismo tiempo en que se apaga una cerilla. Pasaba del frenesí a la melancolía en un segundo y en menos que canta un gallo el sistema solar se catapultaba de la vía láctea al pantano en dirección contraria a su rotación natural, golpeando cada planeta, cada satélite, cada estrella.

Recoger sus pedazos cada día se  ha convertido en una labor ardua e ingrata que la mayor parte de las veces solo rasga mi alegría como un cristal roto desgarraría las alas de un pajarillo, y aún así, sin embargo, como la labor que  Penelope  hace y deshace cobra con un sentido que solo Atlas comprende. El hilo que teje y desteje le da tiempo a quien no lo tiene. La agujas de un reloj parado que no quieto evitan que le reviente la mente, el corazón o su vesícula biliar. Tal vez robar la roca de Prometeo no fuera muy sensato, pero quien sabe si el pajarillo de las alas quebradas no esté aprendiendo a caminar lejos del volcán y con su pico desvíe un río que apague la sed de quienes confunden el agua con alcohol de quemar.

Esta historia no es de final abierto pero en cualquier caso no sera de cualquier final.

miércoles, 12 de marzo de 2025

La madalena de Proust: una percepción evoca un recuerdo intensamente

 A veces, cuando el duelo termina, cuando se acepta la pérdida y la alquimia del tiempo transforma la ausencia en nostalgia,  el recuerdo se engarza dentro del alma  en una sinergia tan profunda que nos une al ser querido de  tal manera que aún estando afuera vive adentro. Sin embargo, el calendario corre, se afana y todas las experiencias compartidas comienzan a  asolarse al fondo  hasta que un día sin saber  cómo una memoria restaña en las raíces  y súbitamente una emoción, una descarga eléctrica nos sacude, conmueve y estremece. 

Aquello le sucedió a ella, algo la arrebató, un remolino de gozo que no encontraría en su vocabulario otra palabra que el término, "duz" para hacerme entender la emoción que la anegaba aquel día en que reconoció en la brisa de la tarde  el aroma a colonia de su madre. Yo hubiera dado la mitad de mi helado de nata para que esa explosión de ternura también ocupara mi alma. No sería entonces, a pesar de los esfuerzos de mi voluntad,  cuando me arrebatará una emoción similar, sino mucho tiempo después cuando ella ya no estaba para compartirlo.

 Me recorrió el cuerpo un escalosfrío de dicha que no tenía  causa aparente, Súbitamente, cuando escuché  por azar una palabra que ella utilizaba de manera corriente, se generó en mí una sacudida tan profunda que tuve que acogerme entre los brazos y la nostalgia lo invadió todo en un relámpago lento y profundamente dulce que me embriagó por completo...  ese instante  fue como descubrir  que Dios existía  y se acordaba de mí...

Ella afirmaba que jamás había percibido antes aquel "duz" que le entro por el cuerpo cuando su memoria reconoció en un perfume el aroma de  su madre después de tantos años de ausencia y yo lo reafirmo por mi experiencia. Puede que solo sea una descarga del sistema nervioso, pero a mi me gusta creer que más bien fue un "arrebato místico" y que ella vino a visitarme aquel día como su madre la visitó a ella.

domingo, 9 de febrero de 2025

 Y ahora que los americanos se disponen a realizar deportaciones masivas de inmigrantes, pretenderán también repatriar a todos aquellos norteamericanos que viven en otros países?  O, tal vez,  obligarán al resto del mundo a encarcelarlos si no desean volver?

I Pajarillo se presenta

 A veces, hay que  reconocer un derrota desde su inicio para no liarse en la frustración como un cordón a la pata de un romano. Desde afuera...